En las páginas de este libro, Isabel Allende narra con franqueza la historia reciente de su vida y la de su peculiar familia en California, en una casa abierta, llena de gente y de personajes literarios, y protegida por un espíritu: hijas perdidas, nietos y libros que nacen, éxitos y dolores, un viaje al mundo de las adicciones y otros a lugares remotos del mundo en busca de inspiración, junto a divorcios, encuentros, amores, separaciones, crisis de pareja y reconciliaciones.
También es una historia de amor entre un hombre y una mujer maduros, que han salvado juntos muchos escollos sin perder ni la pasión ni el humor, y de una familia moderna, desgarrada por conflictos y unida, a pesar de todo, por el cariño y la decisión de salir adelante.
Esta es la familia que descubrimos en Paula y que desciende de los personajes de La casa de los espíritus.Una obra al tiempo emotiva y escrita en el tono irónico y apasionado que caracteriza a la autora, en la que nos entrega la suma de sus días como mujer y como escritora.
Para mi, siempre es un placer leer a Isabel Allende. Me encanta como escribe de forma irónica haciendo parecer los sucesos más dolorosos en acontecimientos casi cotidianos. Con esta narración tan fluida no es extraño que haya devorado el libro en apenas una semana y siendo Navidad, con todos los compromisos que esto conlleva.
"Si hay que escoger entre escribir una historia y ofender a los parientes, cualquier escritor profesional escoge lo primero"
Conocimos a la familia de Isabel Allende en "La casa de los espíritus", que aunque sea una novela se apoyó en personajes reales de su familia, seguimos sabiendo de su vida con "Paula" y ahora 13 años después volvemos a su familia con "La suma de los días". Me falta por leer "Mi país inventado"que también es un libro de memorias.
Tengo que destacar mi predilección por sus libros en los que ella misma es la narradora como "Paula" y "La suma de los dias". Isabel tiene un estilo de vida un tanto peculiar (en mi familia no pasan tantas cosas), y unos razonamientos nada lógicos que dan un poquito de miedo. Con una mentalidad muy Chilena (como lo describe ella misma), es la matriarca de su familia y hará todo lo posible para que estén todos los del clan siempre juntos. Y si pueden vivir en la misma casa mucho mejor. Mentalidad totalmente opuesta a la Europea en que los hijos intentan independizarse cuanto antes, aunque ahora con la crisis esto haya cambiado.
Estas memorias, dirigidas a su hija Paula, van mostrando como ha sido la vida de Isabel en estos 13 años desde su muerte. Como ha sido su proceso de duelo y que sabe que ese gran dolor nunca se irá.
Conocemos a la mujer fuerte, su carácter, demasiado entrometido para con su familia. Nos hace participe de sus pensamientos más íntimos, lo que no siempre caerán en simpatía.
Fiel defensora de la familia, llega incluso a pensar que son de su propiedad.
"Así los sentía a todos
ellos, míos, de mi propiedad: Willie, mi hijo, mi nuera, mis nietos, mis padres
e incluso mis hijastros, con quienes vivía de escaramuza en escaramuza, eran
míos. Me había costado mucho reunirlos y estaba dispuesta a defender a esa
pequeña comunidad contra las incertidumbres del destino y la mala suerte"
Narra también una historia de un amor maduro, de dos choques de culturas, de caracteres totalmente opuestos. La historia de amor de Isabel y Willie, que no ha sido siempre un lecho de rosas.
Cuenta la historia de su propia casa de los espíritus, su anterior casa se quedó demasiado pequeña para albergar todos los miembros del clan, y decidió construir una mucho más grande.
Isabel Allende tiene una vida fascinante, ha viajado al otro lado del planeta para documentarse para sus libros, aunque haya tenido bastantes penas y desgracias, creo que su vida a la edad que tiene ha sido plena, lo que a veces puede dar un poquito de envidia cuando ves que tu vida es lo más normal del mundo y no pasa nada digno de ser contado, y lo digo con toda la admiración del mundo.
Para concluir diré que si eres fan de la autora es un libro imprescindible y por supuesto seguiré leyendo otros títulos que me faltan.
La historia de la creación de "La suma de los días"
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